Congreso Conecoo: el reto de la colaboración entre empresas y administraciones, concienciación social, ecodiseño y economía circular para un futuro sostenible

Escrito por Greene

23 de octubre de 2023
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El pasado 17 de octubre tuvo lugar en Elche, en el Centro de Congresos Ciutat d’Elx, el II Congreso de Economía Circular CONECOO, que contaba con la organización, un año más, del Parque Científico de la UMH junto a CEDELCO, la marca ilicitana Greene y la entidad de gestión de Elche Parque Empresarial.

La premisa fundamental de este congreso ha sido abordar los desafíos inherentes a la economía circular, así como afrontar los problemas y presentar soluciones relacionadas con el ciclo del agua y su reutilización, las tecnología aplicables en la valorización material de residuos y, por supuesto, la responsabilidad ampliada del productor en todo el proceso productivo y gestión de residuos.

De esta forma, se traza una nueva disruptiva en el camino seguido hasta el momento, demostrado y evidenciado por los resultados comentados en las mesas de discusión en la que participaron diversos expertos y empresas del sector. También, se destacó la intrincada naturaleza de esta transición, subrayando la necesidad de un cambio y mayor implicación por la legislación vigente, así como un incremento en inversión y ecodiseño.

Para la apertura del evento, contábamos con Tonia Salinas, directora gerente del Parque Científico de la UMH y con Juan José Cortés, director general de innovación de la Generalitat Valenciana. Aquí, Tonia explicó que desde el Parque Científico se trabajan actualmente dos líneas: por un lado, ayudando a empresas cuyo cuore de negocio nace para contribuir a una solución tecnológica, aportando alternativas o productos relacionados con una base de sostenibilidad; y, por otro lado, ayudando a empresas más maduras y de gran tamaño que deseen introducir o implantar estas tecnologías en sus procesos productivos bajo el concepto de innovación abierta.

El director general de innovación, concluyó, por su parte, que “innovar es hacer las mismas cosas pero de manera diferente. No hace falta que todo sea disruptivo, lo que hace falta es cuidar el entorno”. A su vez, se expusieron diferentes subvenciones que han sido otorgadas a proyectos relacionados con distintos institutos tecnológicos, ligados a proyectos de nuevos modelos textiles, reciclaje químico y recuperación de materiales de alto valor, así como a proyectos ligados a ayuntamientos y mancomunidades.

Ambos ponentes, en representación del Parque Científico de la UMH y la dirección de innovación de la Generalitat Valenciana, detallaron que uno de los principales objetivos es trabajar para adelgazar trámites y ser más ágiles en la adaptación a los ritmos empresariales. Tonia mostró la necesidad de implicación por parte de las grandes empresas para actuar como tractoras e inversoras para aquellas que, en la actualidad, son pequeñas pero pueden llegar a convertirse, a la larga, en grandes potencias. La nueva tendencia es dejar el desarrollo para las startup o spin-off, pero luego pueden ser absorbidas por grandes empresas o acompañarlas en su salida al mercado.

Por su parte, Juan José, director general de innovación, indicó que están trabajando sobre 3 ejes desde la Generalitat: la ley de startup, que es uno de los desafíos de este nuevo gobierno, la ampliación de la ley de mecenazgo para empresas y la compra pública innovadora.

La economía circular del agua y su reutilización

En la primera mesa, con la moderación de Juan Manuel Martínez, director de desarrollo de negocio de Greene, se habló del agua y de cómo aplicar la economía circular en ella, dándole un nuevo uso a aquellas sobre las que se puede actuar. José Navarro, profesor de ciencias ambientales en la UMH, destacaba la importancia de diferenciar entre los distintos tipos de agua que hay y el uso que se les da, ya sea industrial, agrícola, etc.

Desde FACSA, Rubén García, técnico de I+D, hablaba sobre el ciclo integral del agua, y cómo, al aplicar la economía circular en él permite múltiples oportunidades. Comentaba, más concretamente, que el agua es un bien esencial, y que disponemos de ella en para múltiples usos, pero lo fundamental es la regeneración y reutilización de este agua, así como de los componentes que las conforman, sobre todo en las residuales, que pueden recuperarse y reintroducirse en la cadena de valor. También mencionaba que, en este mismo supuesto y dentro de la reutilización del agua, uno de los retos que encontramos es garantizar la seguridad y continuidad de este agua regenerada. A ello, comentaba que “están surgiendo proyectos de investigación con control online de patógenos en las aguas, líneas de desarrollo bastante prometedoras que pueden ayudar a implantar la circularidad del agua en la regeneración”.

Javier Prieto, gerente de Aigües d’Elx, destacó que en la actualidad ya se lleva a cabo la regeneración de las aguas residuales de la ciudad, ya sea para riego o baldeo, por ejemplo, a la vez que se depuran y se produce biogás, que se utiliza para generar calor y energía, utilizando, además, los residuos que estas generan para fertilizantes, lo que supone otra forma de contribuir a la economía circular. Con ello, se crea el 38% de la demanda de depuración con biogás de gestión anaeróbica en las aguas de Elche, tratándose de un carbono de ciclo corto, hacía un pequeño inciso Rubén García, de FACSA, con una huella de carbono neutra, por lo que apostar por este tipo de energías contribuye a descarbonizar el sector del agua. Asimismo, Javier, hacía hincapié que es importante dar una concienciación desde pequeños, y que por ello, desde Aigües d’Elx, ya desde los colegios se conciencia sobre el uso correcto del agua, haciéndoles ver, también, que el agua del grifo, en la ciudad de Elche, tiene una calidad segura y que no hay necesidad de utilizar osmosis ni agua embotellada, que generan más cantidad de plástico, residuos y recursos energéticos.

Por último, José Navarro, mencionó que el agua, los materiales derivados y la energía son los tres temas más importantes a la hora de hablar del ciclo circular del agua, y que es aquí donde debe darse la innovación. También, añadió que las tecnologías siguen con el problema de la energía, consumiendo grandes cantidades, y destacaba el uso de la Inteligencia Artificial para poder regular todo el ciclo integral del agua. “Esto puede aportar datos, puede generar ahorros y puede ser una herramienta muy importante”, reafirmando que no hay que tenerle miedo, sino apoyarse en ella si fuese necesario.

Tecnología aplicable a la valorización material de residuos

Greene - Economía Circular - Valorización Material

En esta segunda mesa, tuvimos moderando a Pascual Martínez, CEO de Desinope, que nos hablaba de la antítesis de la química del agua, que es la química del petróleo, en contraposición a la mesa anterior. En la actualidad, los hogares representan aproximadamente el 22-23% de la generación de residuos, mientras que la industria se lleva las ¾ partes restantes. Por tanto, la industria se considera un agente importante en la valorización de residuos, donde los principales sectores productores de residuos son la construcción y el saneamiento de aguas.

En las empresas que acompañaban a la mesa, encontrábamos varios sectores que también son productores de residuos y que, en su caso, hacen gestión y valorización mecánica de los mismos, así como otras que van más dirigidas a la valorización energética, bien directamente como energía, como productos energéticos o subproductos.

Se empezaba comentando iniciativas para que los residuos sean valorizables, donde Eduardo Fernández, director de innovación de Urbaser, hablaba sobre dos factores fundamentales; primero, recoger esa basura, donde los sistemas de limpieza y recogida son esenciales, y segundo, el pretratamiento que aporta el sector de la gestión de residuos.

Hablando en el caso de Urbaser, cabe destacar que no es una empresa tecnológica, sino un demostrador de las tecnologías que se ofrecen. Urbaser dispone de cualquier tecnología relacionada con la digestión anaeróbica y procesos mecánicos. “La normativa ha ido cambiando y si no aplicamos soluciones innovadoras, nos vamos a quedar atrás”, indicaba. También, esta empresa en concreto, lleva a cabo proyectos de investigación con universidades a través de un centro de innovación en Zaragoza y, donde poder dar el salto de la investigación básica al desarrollo y a la demostración e innovación del proceso industrial.

Leone Scalco, en representación de la empresa química Zahonero, proveedor de otras empresas, y más concretamente en el sector del calzado, comentaba la cada vez más creciente preocupación por cumplir con esta circularidad en todo el proceso de fabricación.  Sin embargo, destacaba, “existe la particularidad de que el calzado es un material compuesto por otros materiales, por lo que el reciclaje de este producto es muy complejo. Por ello, se trabaja mucho en mejorar el diseño de este calzado, para que así sea más fácil su reciclado”, indicando que hay un residuo que se forma en la fabricación del calzado y que se intenta reducir, que es en lo que está actualmente trabajando la empresa. También, Leone comentaba que en Zahonero producen dos tecnologías diferentes: una a base de caucho y otra a base de poliuretano, y que en ambas existen soluciones técnicas para poder reciclarse y transformarse en una materia prima reciclada capaz de usarse en el proceso.

Por último, Juan José Hernández, CEO de Geene, resaltó la importancia de desarrollar tecnología centrada en retirar el residuo que actualmente queda en el vertedero. “No todo el residuo es valorizable, y siempre hay una parte que acaba en el vertedero. Es aquí donde Greene pone su atención”. Es decir, el foco se centra en el residuo que a día de hoy está terminando en vertederos, y que ya no pueden tener una valorización mecánica, pero sí una química. Con ello, el CEO de Greene indicaba que los plásticos se pueden convertir en aceite de pirólisis, nuevos polímeros, etc., y que de la parte biogénica se puede conseguir, mediante técnicas de gasificación, carbones activos, gas de síntesis para producción de hidrógeno verde o biometano. Además, dejaba el foco en tres puntos fundamentales: la legislación y sus procesos largos que, a día de hoy, todavía dificultan la valorización de residuos, ser más estrictos con la normativa y el fraude que se da en las empresas a nivel medioambiental y ampliar en conocimientos, trabajando en una legislación mucho más acorde para el desarrollo de tecnología.

Responsabilidad ampliada al productor del producto

En la última mesa, contando con la moderación de Antonio Gonzálvez, se desarrollaba el tema de la responsabilidad ampliada del productor, y más concretamente centrándose en el sector textil y calzado.

Aquí, Rafael Reolid, responsable de RSC y sostenibilidad del grupo Pikolinos y director de Gerescal, hacía referencia a ella indicando que “cualquier productor que ponga un producto en el mercado debe hacerse responsable de su recogida, clasificación y revalorización a través de una adhesión a un sistema colectivo de responsabilidad ampliada del productor (SCRAP), y llevar así una gestión eficiente”. Asimismo, Rafael Reolid es quien dirige el primer SCRAP del calzado, que se encarga precisamente de que este tipo de producto genere la menor cantidad de residuo en vertederos posible. Por último, indicaba que lo primero que hay que hacer es implantar en las empresas sistemas de medición: si se está ecodiseñando o cuánto. Ahí entrarían los análisis de ciclo de vida del producto, donde se deben medir todos los materiales que se ponen en él, medir cómo se están montando y la cantidad de material que se está incorporando en ellos.

Por otro lado, Jaime Aznar, gerente de Proyecto Lázaro, señaló que “nosotros, como empresa que se dedica a la recogida y gestión de ropa de segunda mano, vemos la problemática, en este caso, con la economía lineal. estamos al final de la cadena y se nos exige que nos hagamos responsable de los residuos”, expresando su preocupación por la dificultad de reciclar algo que no cuenta con un ecodiseño.

Sheim Guerrero, secretario jurídico de Ecotextil, apuntaba que la normativa ha ido transformándose para responsabilizar cada vez más a los productores de esta gestión. “El objetivo que ha tenido la Unión Europea es recoger más, reducir más y reutilizar más, y trasladar ese coste de gestión a los productores”, apuntaba. De este modo, la economía podría desarrollarse de forma conjunta, tratándose de un proceso sencillo pero complejo a la hora de su aplicación. Guerrero, también apuntaba que la única forma de realizar un cambio social, no solo en los hábitos de consumo, sino también en la producción, es a través de la responsabilidad ampliada del productor. “El sector textil es en la actualidad uno de los sectores más contaminantes y cuyos residuos acaban en mayor porcentaje en vertederos”, puntualizó, haciendo referencia a la cantidad de campañas de concienciación que se han hecho para evitar el greenwashing. Igualmente, añade que “cuando se introduce la variable de la responsabilidad ampliada del productor, obligándole a asumir un gasto económico para hacerse cargo de sus residuos, se generan unas oportunidades de mercado muy grandes: separación multicapa, nuevo reglamento y, sobre todo, obligar a los productores a que generen un producto de origen mucho más sostenible”. En cuanto a la legislación, se ha considerado una de las mayores dificultades, a pesar de que estas juegan un papel fundamental. “Una de las grandes discusiones de hoy en día no es si hay que ecodiseñar o no, el ecodiseño es una realidad, sino cómo internalizar estos costes de recogida selectiva de residuos y transformarlos en material que puedan incorporar a su proceso de producción”, hablando también del sector retail y poniendo como ejemplo los contenedores que muchas han optado por instalar en sus propias tiendas. “Reciclarlos a través de procesos donde las propias empresas asumen el coste, significa incorporar en sus propios procesos productivos un material reciclado en el que ellos van a controlar el coste de producción y gestión. Se llevará a cabo un sistema mixto entre una gestión individual del productor y un sistema colectivo donde todos contribuyan. Con ello, el coste que tenga este material reciclado repercutirá en el sistema en general.” subrayó Guerrero, como aporte final.

Ponencia de Javier Clemente

Por último, daba pie a la ponencia de Javier Clemente, fundador del proyecto “Todos Somos Reciclaje” y divulgador de la materia. En primer lugar, destacaba que estamos consumiendo más recursos que los de la tierra es capaz de regenerar dentro de nuestro estilo de vida actual. Clemente, enfatizó que “en el medio ambiente no hay castigos ni hay recompensas. Hay consecuencias por la manera de producir y consumir”.

Una de la soluciones, comentaba, pasa por evolucionar de la actual  «economía lineal» en la que se extraen recursos, se utilizan y se tiran, a una «economía circular» que cierra el ciclo de los materiales e intenta mantenerlos en uso el mayor tiempo posible, dándoles un valor y reduciendo la generación de residuos, el consumo de recursos y la contaminación a lo largo de todo el ciclo de vida de los productos y los servicios. La economía circular permite desacoplar el crecimiento económico de la generación de residuos y el consumo de recursos. En España, las cifras son claras: la mayor parte de residuos, el 48%, acaban en vertederos y solo reciclamos el 40%.

Así pues, también hacía hincapié en que no solo hay que centrarse en el reciclaje, sino que hay que centrarse en todo el ciclo de vida del producto y, para ello, es fundamental el ecodiseño, porque en la fase de diseño se determina el 80% de los impactos ambientales de un producto. “Un ecodiseño consiste en incorporar las cuestiones ambientales al diseño de producto pensando «¿cómo puedo hacer mi diseño para que mi producto tenga un mejor desempeño ambiental?» y centrándose en las materias primas, evitando que tengan sustancias tóxicas, incorporando material reciclado y menos cantidad de materia prima. También teniendo en cuenta la fabricación para que sea más eficiente, su uso y su fin de vida”, explicaba. “La economía circular son eslabones de una cadena que están formados por las empresas, la ciudadanía y las administraciones. Si uno falla, la cadena no funciona y no gira.” concluía Javier Clemente.

Conclusiones y cierre 

Para terminar el evento, Sol Segura, directora de CEDELCO, ponía sobre la mesa algunas conclusiones finales con las que zanjar la segunda edición de CONECOO, en referencia a los diversos temas que en él se han tratado.

Mesa 1: La economía circular del agua y su reutilización

Nos quedamos con los retos en concienciación social. La forma en cómo encontramos la energía durante el proceso nos dará la oportunidad de disminuir la huella de carbono.

Mesa 2: Tecnología aplicable a la valorización material de residuos

No todo el residuo es reutilizable; hay una parte que acaba en el vertedero y hay que tener una visión más sistemática para que todo funcione, haciendo hincapié en la necesidad de la inversión y la agilización burocrática.

Mesa 3: Responsabilidad ampliada al productor del producto

La administración juega un papel clave para saltar las barreras a las que se enfrentan las empresas.

Mesa 4: Javier Clemente

El mejor residuo es el que no se genera y, si lo generamos, minimizarlo lo máximo posible.

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